Petro denuncia amenazas de muerte contra su hija menor — ¿quiénes están detrás?

El presidente Gustavo Petro reveló que su hija Antonella Petro, de apenas 16 años, sería objetivo de un atentado. "La amenazaron, y hay un asesino por ahí que quiere atacarla a ella antes que a mí, porque, dice el asesino, es lo que más quiero en mi vida", declaró el mandatario, en un tono que mezcló indignación y advertencia.
¿Qué se sabe de las amenazas?
Petro no dio detalles concretos sobre el origen, autoría o pruebas de la presunta amenaza, pero vinculó el hecho al clima político polarizado que vive el país.
La Fiscalía, consultada por este medio, no ha confirmado investigaciones activas al respecto, aunque fuentes cercanas aseguran que Inteligencia de la Policía ya revisa los antecedentes.
Antonella Petro, la menor involucrada, ha mantenido bajo perfil público, a diferencia de su hermano Nicolás Petro, cuya vida privada ha sido foco de controversias mediáticas.
Reacciones inmediatas: solidaridad y escepticismo
Partidos aliados, como el Pacto Histórico, cerraron filas: "Ningún niño debe ser instrumento de guerra sucia", afirmó la senadora María José Pizarro.
Sectores opositores exigieron pruebas contundentes: "Las denuncias graves no pueden quedarse en declaraciones. ¿Dónde está la investigación?", cuestionó el representante Miguel Uribe Turbay.
En redes, la polarización fue evidente: mientras algunos usuarios exigieron protección inmediata, otros acusaron al presidente de usar el drama familiar como cortina de humo ante los debates por reformas y escándalos recientes.
Antecedentes que preocupan
No es la primera vez que el presidente denuncia ataques contra su familia:
En 2023, su exesposa, Katia Burgos, reportó amenazas tras la ruptura.
Su hijo Nicolás Petro enfrentó un intento de secuestro en Barranquilla (2019), según versiones oficiales nunca esclarecidas del todo.
La pregunta clave: ¿Qué hará el Estado?
El Ministerio del Interior y la Unidad Nacional de Protección (UNP) no se han pronunciado sobre medidas extraordinarias para Antonella. Sin embargo, analistas advierten que, de confirmarse la amenaza, el caso podría escalar a un debate sobre seguridad presidencial y violencia política.
Mientras tanto, el mensaje de Petro resonó como un llamado a la empatía y, a la vez, como un nuevo capítulo en la tensión que marca su gobierno.