Supertransporte declara la guerra a conductores de Uber y Didi

Bogotá, Colombia — La Superintendencia de Transporte (Supertransporte) ha tomado una drástica medida en el conflicto de transporte en Colombia al emitir una orden que requiere la inmovilización inmediata de todos los vehículos que operan bajo las plataformas de Uber y Didi en el país. Esta decisión ha generado una fuerte reacción y preocupación entre los conductores y las familias que dependen de estos servicios.
Según la resolución reciente, la Supertransporte ha instruido a las secretarías de movilidad de todas las ciudades y municipios colombianos a que procedan con la inmovilización de vehículos asociados con las mencionadas aplicaciones de transporte. Aquellos funcionarios que no cumplan con la orden se enfrentarán a multas que podrían ascender a 200 millones de pesos.
Esta medida afecta a más de 1.5 millones de familias en todo el país que dependen de estos servicios para su sustento diario, generando una ola de incertidumbre entre los conductores y usuarios de las plataformas. La decisión ha sido criticada por muchos, quienes señalan que la inmovilización repentina podría dejar a numerosas personas sin una fuente de ingresos y limitar el acceso a transporte para miles de colombianos.
La Supertransporte argumenta que la medida busca regular el transporte de manera más efectiva y asegurar el cumplimiento de las normativas locales, que según el organismo, las plataformas de Uber y Didi no están respetando adecuadamente. Sin embargo, la implementación de esta orden ha sido recibida con escepticismo y preocupación tanto por los conductores como por los usuarios, quienes temen un impacto negativo significativo en sus vidas y en la economía del país.
Las reacciones no se han hecho esperar, con múltiples llamados a las autoridades para que reconsideren la decisión o encuentren soluciones alternativas que no perjudiquen a tantas familias. Mientras tanto, se espera que las autoridades locales comiencen a ejecutar la orden en los próximos días, lo que promete intensificar el debate sobre el futuro del transporte en Colombia.